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Seguro Nacional de Salud (PSN) obtenido durante el ejercicio 2021, después de impuestos, Beneficio de 1,8 millones de euros a finales del año pasado, registrando un crecimiento de 200% respecto a 2020como ya se dijo en la Asamblea General de Asociados de la aseguradora, máximo órgano de decisión, en la que los accionistas han respaldado incuestionablemente los resultados.
Considerando el resultado consolidado del conjunto del grupo, el beneficio ascendió a 4,2 millones. Los fondos propios de la entidad crecieron 2%, hasta 72,3 millones. El ahorro gestionado por la entidad prácticamente no ha variado, situándose en 1.571, y Los ingresos se mantuvieron por encima de los 200 millones, en concreto, en 215,4.
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Además de analizar los resultados puramente empresariales obtenidos a lo largo del año, Miguel Carrero, presidente de PSN, quiso destacar en su Informe las características “que mejor representan a PSN y su identidad solidaria mutua, repercutiendo directamente en el beneficio del grupo protegido". En este sentido, aludió a la Participación en Utilidades, “un valor extra que otorgamos a nuestros afiliados con Ahorro y seguros mixtos, aumentando así la rentabilidad que reciben de su Mutua”. Durante 2021, este tipo de productos obtuvo rendimientos de hasta 3.75%, porcentajes inusuales en el momento actual en las tasas de interés, especialmente en lo que respecta a productos garantizados. Estos rendimientos permitieron repartir el año pasado 7,2 millones entre mutualistas, cifra que representa 22% más que el año anterior, cerca de 77 millones en la última década.
Adaptarse a la crisis y avanzar hacia la normalidad
Otro de los grandes aspectos que destacó Carrero fueron los beneficios pagados al grupo mutualista, “nuestro máximo compromiso con los mutualistas y motivo último por el que los profesionales universitarios miran a nosotros como garantes de su protección y de su futuro”. Durante el último ejercicio financiero, hubo 244,8 millones de euros destinados a cubrir necesidades y contingencias tan sensibles e importantes como fallecimiento, invalidez, bajas laborales o jubilación.
Miguel Carrero aludió directamente a las consecuencias provocadas por la Covid-19: “Enfrentamos y enfrentamos una situación crítica, un momento en el que fue necesario adaptarnos a las circunstancias impuestas que nos aislaron y trajeron un sufrimiento brutal” en todo el escenario mundial. En este sentido, recordó que 2020 fue un año para tomar decisiones que, aunque complicadas, perseguían el propósito de “garantizar con la mayor fortaleza la protección de uno mismo y de quienes más valora”. Decisiones difíciles en muchos casos, pero necesarias, derivadas directamente de esta crisis o simplemente aceleradas por ella y que, en consecuencia, logró una reducción significativa en los costos generales de más de 22%", Él concluyó.
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